Sello de reconocimiento EFQM, ¿qué debes saber?

El sello de reconocimiento EFQM a la excelencia empresarial funciona a nivel europeo. Se trata de una certificación con la que las organizaciones pueden demostrar la calidad en todo el viejo continente y competir a nivel internacional.
Este modelo de certificación empresarial se ha convertido en una vía de autoevaluación y de la determinación de los procesos de mejora continua, que ayuda tanto en entornos empresariales privados como a organizaciones o entes públicos. El sello de reconocimiento EFQM ha alcanzado una gran importancia a nivel europeo.
Hablamos de un modelo de calidad que viene definido por la Fundación Europea para la Gestión de la Calidad, (sin ánimo de lucro).un organismo que tiene más de 500 socios a nivel europeo y presencia en más de 55 países, aunque la sede y la fundación están en Bruselas
Es nuestro país son ya más de 500 las empresas que cuentan con esta certificación. Un sello que consigue posicionar a las organizaciones en el marco empresarial europeo como organizaciones que cumplen los requisitos de calidad.
Principios del sello de reconocimiento EFQM
Entre los principales conceptos que engloban el proceso de certificación del modelo EFQM, destacamos:
- Orientación empresarial hacia los resultados
- Orientación al cliente
- Liderazgo y coherencia a nivel empresarial
- Modelo de gestión por procesos
- Implicación de las personas dentro de la organización.
- Proceso continuo de aprendizaje, innovación y mejora.
¿Cómo conseguir podemos conseguir el sello de reconocimiento EFQM?
Para conseguir esta certificación EFQM debemos seguir este proceso, que engloba diversas fases y que se puede alargar incluso hasta cerca de dos años:
1º Autoevaluación general de la empresa: pasando por todos los departamentos y aspectos clave.
2º Plan de mejora para la organización; que englobe todos los aspectos mejorables en la gestión de la misma.
3º Visita de validación de la propia fundación. Durante este proceso, se deberán demostrar todas las acciones de mejora llevadas a cabo.
Un proceso largo, para conseguir un modelo que tan solo tiene dos años de validez, cierto es, pero que podrá abrir grandes puertas a tu organización para instalarse en el marco europeo.